En 2019, los extraterrestres han aniquilado casi por completo a la humanidad con sus poderosas habilidades de transformación. Los extraterrestres se asientan en la Tierra y adoptan la cultura humana. Yohei, un estudiante alienígena, debe alimentar a dos pollos de su instituto. Sin embargo, sin que él lo sepa, esos dos pollos ocultan un sorprendente secreto.

Los latidos de Sasaki se aceleran cada vez que ve a la profesora Kawaguchi. La tiene en un pedestal y la considera una diosa. Durante una clase de refuerzo a la que va solo para verla, un hombre armado irrumpe en el aula. Mientras apunta a los alumnos, le exige algo egoísta a Kawaguchi, pero Sasaki se abalanza delante de la pistola.

Ibuki se arma de valor antes de su graduación y le ofrece a Yuri volver juntos a casa. Como Ibuki irá a una universidad del extranjero, será la última vez que la vea. Dispuesto a declararle su amor, cuando reúne el coraje para hacerlo, lo interrumpen varias situaciones. Pero esas no son sus prioridades.

Tras una infancia de abusos, ahora Shikaku es una infame asesina. Yugeru, un vampiro de 3500 años, la contrata para que acabe con su hastiada vida. Pero ni Shikaku es capaz de concederle su deseo. Cuando vuelve a casa, Shikaku se ve incapaz de dejar de pensar en Yugeru y le invaden unos sentimientos desconocidos.

El mayor tesoro de Toshihide es un piano abandonado bajo el mar. Cuando lo toca, se siente conectado a su madre, que era una sirena. Un día, conoce a la sirena Shiju, que escucha su música en secreto y le salva la vida. Cuando él le ofrece enseñarle a tocar el piano, se hacen buenos amigos. Pero las sirenas son criaturas terroríficas que se alimentan de humanos.

Toshihide se despierta un día con una enfermedad rara e incurable. Ahora que se ha convertido en una preciosa mujer, es víctima del acoso de los hombres. Cuando Akira, el hermano de su novia, acude a su rescate, Toshihide se percata de que se siente atraída hacia él. En plena confusión, Toshihide y su novia deberán decidir qué será de su relación.

Nayuta, la hermana pequeña de Kenji, tiene astas en la cabeza, no sabe comunicarse, mata a animales a los que se come crudos y todos la aborrecen, porque es la niña que, según la profecía, destruirá el mundo. Pero su hermano solo la tiene a ella y hace lo posible por protegerla. Todo se complica cuando Nayuta provoca al pueblo.

Mitsuko, de 18 años, se encuentra con un cuadro humillante de sí misma. Lo pintó Kyoko, su hermana pequeña, y, como fue la ganadora del concurso de arte, no lo quitarán hasta dentro de un año. Mitsuko, en un intento de vengarse, decide hacerle lo mismo a su hermana. Mientras la pinta, Mitsuko reflexiona sobre su distante relación con ella.