Antonio, un misterioso hombre llega a la ciudad en medio de una festividad religiosa buscando venganza contra las personas que le hicieron daño a su madre hace 46 años. Él se dispone a asesinar a esas personas según los signos zodiacales y los astros. Sus primeras víctimas son dos pares de hermanos, Rafaél, el Padre Canteras y los Hermanos Perez, los cuales son encontrados representando el signo zodiacal de Géminis.

La hermana de Antonio, Laura, comienza a sospechar que el asesino trabaja en la editorial de una revista debido a que en la página de horóscopos, está más que claro que el signo Géminis les advertía lo que les pasó a las primeras víctimas. Por su parte, Antonio atrapa a dos nuevas presas, el pescadero Duarte y el comisario Abdala. Esta vez se basa en el signo Cáncer. La esposa de Antonio, Monica, comienza a sospechar de él.

Laura y Pablo deciden ir al hogar de Nelly al saber que supuestamente ella escribía el horóscopo en la revista. Antonio, quien realmente lo escribe, decide matarla para no ser delatado, pero justo se topa con ellos, y antes de huir, le dispara a Nelly en la cabeza. Ella sobrevive y queda en coma. Cuando despierta, Antonio intenta nuevamente matarla y ella finalmente muere. Su próxima víctima es una mujer, María Del Carmen, quien contiene el signo Leo.

Mónica sabe que Antonio tiene algo que ver con los misteriosos asesinatos. Su próxima víctima es un amigo de la infancia llamado Darío, el cual contiene el signo Virgo. Se da a conocer que Pablo tiene una relación con Florencia, la periodista. Antonio accidentalmente mata a Monica lanzándola por la ventana, por estar ella alterando sus planes. Finalmente, él ahorca, duerme y secuestra a Darío, aprovechando una breve distracción de Laura.

Continúa el Mes de Virgo. Antonio se lleva a Darío a aclarar cuentas pendientes, y termina asesinando, luego de dar a conocer que Ramiro Gómez los abusaba de chicos. Martín, en el día de su cumpleaños, hace una fiesta secreta en la casa abandonada sin saber que Rubén está encerrado en el sótano. Pablo y Laura reavivan su amor. Antonio realiza la autopsia de Darío falsificando las cosas. La sobrina de Nelly cuenta que el asesino se basa en el horóscopo. Ricardo declara que conoce al asesino, sospechando este de Antonio, pero no lo delata para hacer un trato con él. Sofía le cuenta a Antonio lo de la fiesta, y este rápidamente va a terminar eso debido al miedo de que Rubén logre escapar y delatarlo.

Antonio le da una paliza a Rubén por este tratar de escapar. Martín ve muerta a Laura en un sueño y siente miedo del asesino de Penitentes. El trato de Antonio y Ricardo, es asesinar a un hombre llamado Fabian, debido a que este tenía relaciones sexuales con la chica que a Ricardo le gustaba; si Antonio cumplía con el trato, Ricardo no lo delataría. La próxima víctima de Antonio es Beatríz, la mamá de Ricardo, quien contiene el signo Libra. Al ser esta asesinada, es encontrada por Ricardo, quien luego va preso por ser el supuesto asesino de su madre, y de Darío, ya que la policía encontró pruebas contra él (obviamente es una falsificación hecha por Antonio). Ricardo culpa a Antonio de los asesinatos, pero nadie le cree. En la comisaría, Antonio lo chantajea y le da a elegir entre matar o morir. Ricardo elige morir, y finalmente se suicida.

Un hombre de apellido Pomaro es asesinado supuestamente por el asesino de Penitentes. Laura piensa que se basa en el signo zodiacal que sigue, pero luego de que Antonio investigue bien el caso, descubren que Pomaro murió en Libra, y que el supuesto asesino es su vecino Villanova. La nueva víctima de Antonio es su prisionero, Rubén, quien contiene el signo Escorpio. Es asesinado por una toxina que Antonio le inyecta y encontrado en un colegio, en el día de elecciones políticas. Pablo luego de discutir con Martín y Antonio, gracias a unas grandes razones, comienza a sospechar que el asesino es él.

Al mes siguiente, toda la gente de Penitentes se reúne en un gimnasio para evitar un nuevo asesinato. Pablo, quien sospecha de Antonio, decie vigilar cada uno de sus movimientos. Se da a entender que la empleada, Silvina, podría saber algo sobre Antonio. Varia gente se intoxica, y 4 personas están en peor estado. Pablo y Florencia, quien encontró vomitivo, creen que 1 de ellos 4 es el siguiente, pero están equivocados. La nueva víctima es Alicia, asistente médica de Rubén en la época de niñez de Antonio, quien contiene el signo Sagitario.

Pablo, al verse humillado por el asesino, decide recuperar su familia a toda costa, pero antes debe deshacerse de su sospechoso principal. Antonio, por su parte, comete su primer asesinato fuera de Penitentes. La nueva víctima es Osvaldo, el padrastro de Antonio, quien contiene el signo Capricornio. Osvaldo, antes de morir, le dice que quien abusaba de Antonio era su madre, pero este no le cree y lo mata. Además de ser el primero fuera de la ciudad, también fue su primer asesinato con algunos errores, los cuales beneficiaron a Pablo. El juez decide exumar el ataúd de Mónica, lo cual trae otro problema grave a Cruz. El doctor, con ataques de estrés, recibe por la noche una visita de Mónica, la cual le dice que al abrirse su ataúd, la verdad se revelaría. Pablo, quien logra volver a convivir con Laura y mejorar su relación padre e hijo con Martín, finalmente ata los cabos sueltos, encuentra culpable a Antonio, y junto a su compañero de Tapalquera, Morel, decide arrestarlo.

Continúa en el Mes de Capricornio. Pablo y Morel llevan a Antonio a la comisaría de Penitentes para arrestarlo por el crímen, pero por un percance, paran en un autoservicio. Antonio, aprovechando la distracción de ambos, escapa del vehículo, y luego de asesinar a Morel, se revela ante Pablo como el Asesino de Penitentes. El fiscal se convierte en su nueva víctima, y Laura, al ver su cadáver llora desconsoladamente, como también lo hacen Martín y Sofía al conocer la desgracia. Al día siguiente, la familia Cruz-Agüero, acude al funeral de Pablo, y allí, Florencia intenta decirle a Laura lo que Pablo trataba de descifrar en el caso de Osvaldo Sima. Finalmente, Antonio chantajea y amenaza a Florencia con asesinarla a ella y a su hermana, si seguía metiéndose en sus asuntos. Florencia le dice a Laura que busque a Silvina y se va.

Un mes después de la muerte de Pablo, la nueva fiscal de Buenos Aires, Norma Piccoli, quiere cerrar el caso de Asesino de Penitentes al no haber, supuestamente, ningún testigo, pero Laura se rehusa a cerrarlo. Ella y Carpaneto viajan a ver a Silvina para saber que fue lo que ella vio, pero esta no les dice nada. Antonio, por su parte, consigue sus nuevas presas. Las nuevas víctimas son Graciela Fuentes, que contiene el signo Acuario, y su marido Julio Fuentes, que contiene el signo Piscis. Gracias a los horóscopos y las hijas gemelas de los Fuentes, Laura se dirige al lugar, pero Antonio comete sus asesinatos y escapa sin ser atrapado. Julio logra sobrevivir, pero al día siguiente, ya en el Mes De Piscis, Antonio enmenda su error y lo asesina. Laura busca su último testigo, Florencia, que está en Tapalquera. Cruz se le adelanta e intenta secuestrar a Barón, pero ella escapa, llama a Laura para decirle todo, pero en una persecución con el asesino, sufre un accidente que lamentablemente la mata al instante.

Laura recibe la noticia de la muerte de Florencia, y harta de la incompetencia de Norma, golpea a la fiscal. Mientras Gutierrez interroga a Aragón, Laura se da cuenta de que la letra de la lista de Osvaldo es la letra de Antonio, y luego comienza a sospechar de él gracias a Aragón. Laura llama a la ex-asistente de Sima, y le manda una imagen para saber si "Emilio Pardo", el asesino, es Antonio. La mujer le dice que es él, y Laura confirma sus sospechas. Finalmente, dolida por todo el asunto, decide acabar con él, pero Cruz logra escapar hacia Mendoza. Al mes siguiente, Laura les cuenta a sus compañeros quien es su principal sospechoso, mientras que Antonio vuelve a Penitentes escondido dentro de un cajón en una mudanza. Gracias a Constanzo, quien interviene en la señal del telefono del doctor, Laura va a buscarlo en su casa, pero Cruz en realidad está en la casa abandonada de enfrente planeando su próximo asesinato. La nueva víctima de Antonio es Cecilia, quien contiene el signo Aries.

Continúa en el Mes de Aries. Antonio masacra el cuerpo de Cecilia, mientras que Laura finalmente llega al escondite de su hermano. Al entrar, tiene una breve pelea con él, pero Antonio consigue atarla de pies y manos. Junto a la rueda zodiacal, el doctor le cuenta el por qué de sus asesinatos. Cuando Antonio se va al matadero con el propósito de triturar el cadáver de Cecilia, Laura logra desatarse y es salvada por Martín y Carpaneto. Cruz lleva la carne picada a la iglesia, carne con la cual Botto (el marido de Cecilia) cocinaría empanadas para el almuerzo en honor de los difuntos de Penitentes. Laura reúne valor y le cuenta la verdad de Antonio a Martín, y Norma decide pedir al juez una orden de arresto para Cruz. Parisi encuentra al doctor e intenta arrestarlo, pero Antonio se las ingenia para detenerlo. Cuando Cruz decide acabar con el policía, es interrumpido por Martín.

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Antonio, luego de cometer su último asesinato, finalmente es arrestado; pero antes de ser trasladado por la policía, obliga a que su hermana lo lleve a la iglesia y ella acepta debido a que Cruz tenía cautiva a la hija de Elena. En la iglesia, el doctor obliga a todos a pedir perdón por los crímenes y por su madre. Cuando la policía lo va a arrestar, intenta suicidarse. Al mes siguiente, comienza un nuevo Mes de Géminis. Se lleva a cabo una nueva festividad por el día de Penitentes. Se cumple un año desde que Antonio empezó a matar, y en ese día también es su juicio. En la prisión, Antonio se las arreglará para escapar como sea; una mujer llamada Sofía entra a la prisión haciendose pasar por su mujer (en realidad era la pareja de Raúl, un criminal amigo de Antonio). Laura, intenta rehacer su vida, pero lo pasado la sigue atormentando. Finalmente, Sofía consigue ayudar a escapar a Cruz, pero este la traiciona y la termina asesinando.

Antonio logra escapar de todo y busca a su familia para despedirse, pero al verse perseguido por la policía del pueblo, secuestra a su hermana y a sus sobrinos para matarse junto a ellos. Carpaneto será quien deba enfrentarse con la parte más desquiciada de Cruz. La familia corre peligro en manos de Antonio, el cual no tendrá piedad para nadie. Ya nada será igual que antes.