Bill se enfrenta a la difícil batalla para ganarle a sus empleados, mientras su familia trata con los traumas del hogar. Alby regresa de su exilio con un nuevo deseo de “purificar” el complejo, y además, vengarse de Bill.

Bill prepara una reunión para proteger a los líderes polígamos pero es interrumpido por Alby. Intentando encontrar entendimiento con su madre, Barb le pregunta a Nancy si quiere unirse a ella en el simposio mormón de madre-hija.

La paz familiar peligra cuando Margene decide revelar un secreto relacionado con su edad que ha guardado desde que se casó con Bill. Mientras, Cara Lynn ha decidido que quiere averiguar más sobre su padre, por lo que comienza a investigar y a preguntar a sus familiares.

Mientras la ceremonia del acto de posesión se acerca, Bill intenta hacer ver a algunos de sus nuevos compañeros que la poligamia no está tan mal. Además, Nikki y Margene se enfadan después de que Barb acuda en calidad de esposa de Bill a un importante acto de moda.

Bill acepta un trato, pero rechaza otro. Acusan a Nicki de tener distintas motivaciones. Barb se plantea un cambio de vida radical.

Bill tiene que afrontar un boicot de los Mormones mientras Barb anuncia que quiere ejercer el sacerdocio. Por su parte, Margene encuentra un patrocinador para el rally infantil pro-poligamia y Cara Lynn acerca posiciones con su profesor de matemáticas.

Bill ve una boda como la oportunidad para sellar su compromiso con sus tres esposas, aunque Barb continúa escéptica. Nicki, mientras, busca sacarle provecho a su día especial. Cara Lynn trae un invitado al teatro.

Bill comienza a investigar el pasado de Alby con el objetivo de encontrar información comprometedora que lo ayude a truncar sus pretensiones. La complicada y delicada situación acabará salpicando también a Barb. Mientras, Margene descubre el secreto de Cara Lynn.

La familia Henrickson se enfrenta a una complicada situación que podría saldarse con una sentencia de 20 años de cárcel para Bill. Mientras, Nicole planea enviar a un internado a Cara Lynn tras descubrir el 'affaire' de ésta con su profesor de matemáticas.

Bill se enfrenta a un futuro incierto y, tras haber pasado dos días en la cárcel, la prensa no para de increparlo para conseguir el mejor titular. Con la amenaza de una pena de prisión más dura sobre sus hombros, el patriarca organiza planes de futuro para la família.