Capitanazo confunde a una familia griega que se acaba de mudar a su vecindario con una fraternidad universitaria, y al ver que la familia lo saca de la casa crea su propio club con Xander y Mueble y secuestran a la hija de la familia creyendo que era una cabra. Morocha convence a Capitanazo para que la niña regrese con su familia. Mientras, el padre de Ling-Ling quiere casarse con Lulú, y esta acepta porque el padre de Ling-Ling es millonario.

Un Terminator intenta evitar que el nuevo programa infantil de Mueble convierta al mundo homosexual después de que Clara le alerta de este problema, lo que hace que Mueble huya con la ayuda de Xander, que es del «futuro gay», causado por el programa. Terminator se hace amigo de Capitanazo. Por otra parte, Lulú persigue el mítico Salchichamovil, aunque Morocha y Ling-Ling, creyendo que es sólo un mito, la encierran en el armario para evitar que lo busque.

Morocha va a los campeonatos mundiales de deletreo con ayuda de Puerquisimo, Mientras tanto, Capitanazo sale con Clara, descubriendo que esta tiene un fetiche sexual por los accidentes automovilísticos. Al darse cuenta de que Clara sólo quiere salir con él porque quiere que le provoque accidentes para cumplir sus fetiches, Capitanazo decidirá darle una lección.

Capitanazo pelea contra un gigante retrasado mental que está destruyendo la ciudad, pero se da cuenta antes de matarlo de que tiene brazos de T-Rex en su pecho. Lo deja escapar porque se da cuenta de que es su hijo (todos los zebulonianos tienen brazos de T-Rex en su pecho, algo inédito hasta el momento). Clara mantiene enfermo a Mueble para que reciba atención por cuidarlo, aunque Morocha la persigue.

Alguien ha robado en la Casa de los Dibujos, y Morocha averigua que fue su nieto Ray-Ray. Por una confusión, la policía detiene a Morocha y es llevada a juicio, mientras que su nieto se esconde detrás de las paredes de la casa. Al ver por un agujero a Lulú, Ray-Ray se enamora de ella (más bien de su enorme trasero), y se pone a cumplir todo lo que Lulú anota en su diario. Mientras que Capitanazo, traumatizado por el robo, decide adquirir un arma.

Lulú y Ling-Ling ganan un viaje a México. En su estancia, son multados con billones de pesos, y para librarse de ello, Ling-Ling se dedica a las peleas de gallos para sobornar a la policía mexicana dejándolos libres. Mientras Capitanazo está desesperado por pasar el rato con los Cool Kids (Morocha, Clara y Puerquísimo), pero no puede, hasta que Morocha le da la oportunidad de unirse a ellos para que luego éste salvara a la ciudad de un meteorito.

Clara predice el fin del mundo y se lo cuenta a Morocha, pero ella no le hace caso. Xander convence a la pandilla de ir al centro comercial, a excepción de Clara que es dejada atrás por sugerencia de Morocha. Sin embargo, los chicos quedan atrapados en una furgoneta que queda en la plaza de aparcamiento y Morocha escapa para buscar ayuda, pero es secuestrada por un vendedor de una tienda. Clara cree que sus compañeros han sido raptados para «ir al Cielo».

Mientras intenta salvar a sus amigos de la furgoneta, Xander se convierte en un vagabundo y abandona a sus compañeros por otros dos vagabundos adoptando su estilo de vida. Morocha es capturada por un cajero gótico en Hot Topic y Clara olvida su religión y se convierte en el secuaz rebelde y pecador de un cartero al que ha confundido con Satán. Los demás siguen encerrados dentro de la furgoneta, esperando a que Morocha o Xander los salven.

En una noche de borrachera entre amigos, Xander le rapa la ceja a Ling-Ling mientras duerme, por lo que este lo mata. Mientras compraban más alcohol, el grupo atropella a un indigente, quien resulta ser Scroto, el archienemigo de Capitanazo. Paralelamente, Puerquísimo tiene un extraño romance con una araña llamada Charlotte. Ling-Ling revela su sueño de ser bailarín y termina consiguiendo un papel en un musical.

Mueble y Lulú desean ser las nuevas mascotas de las cajas de cereales para el desayuno comandados por Frankeberry. Mueble gana el concurso, y una resentida Lulú tratara de vengarse hasta que Quakers, el pato mascota anterior del cereal, aparece para ayudarla. Nadie en la casa cree, hasta que Morocha ayuda a Lulú a buscar pistas. Viajan a África con el objetivo de ayudar, y descubren que los niños son explotados laboralmente, pero al final logran salvarlos.

Los compañeros de casa, como versiones bebés de ellos mismos (el episodio en sí es una referencia a la serie animada de los 80's Muppet Babies), muestran las situaciones que los llevó a convertirse en los adultos que son. Capitanazo ama las reglas, Xander adora las niñas, Clara es liberal, Morocha adora su castidad, Mueble es un niño llamado Noe, Lulú no tiene problemas de sobrepeso, Ling-Ling sabe hablar español, Puerquísimo es higiénico y Sid (probablemente el productor judío) tiene una cara normal y duerme mucho boca abajo. Ellos matan accidentalmente a su niñera y tratan de encubrirlo ante Chad, el rico novio de la niñera, mientras sus cuidadores están ausentes.

Capitanazo envidia los piercings que Xander tiene en los pezones y decide hacerse uno con la bocina de un juguete. Cuando sale hay tormenta y es electrocutado, lo que le permite hablar con él mismo del pasado. Mientras tanto, Ling-Ling es adoptado por el papa de Morocha, quien es el Rey del Arroz.

Lulú y Morocha hacen una apuesta donde esta última deja atrás su promiscuidad y Lulú debe tener mucho sexo. Sin embargo, Lulú descubre que nadie quiere tener algo con ella hasta que es atropellada por un automóvil en el que viajaba una familia de hindúes que la confunden con una vaca parlante y la lleva a la India para que sea su Díos. Mientras, Morocha va con Mueble para que la hipnotice, éste le menciona que Fat Albert abusó sexualmente de ella, argumentando que los psicólogos meten ideas falsas en sus pacientes.

Los inquilinos de casa compiten en un concurso de talentos al puro estilo de American Idol. Al final del episodio, ellos leen una carta que les informa que han sido cancelados y entran a una habitación marcada como «Desempleo».